Julián Rasero, el último fichaje del club, responde a unas preguntas.
- ¿Cómo empezaste a jugar a balonmano?
Mi padre me engañó. Hasta los 18, aparte del futbol, el deporte al que competía era el tenis. Estaba un poco cansado de esos entrenamientos tan individuales, mi padre debió de darse cuenta, así que un día me dijo que cogiera las zapatillas de deporte y me fuera con él, no tenía ni idea de donde me llevaba. Aparecí en el pabellón, y allí que me soltaron. Debió de ser gracioso, una pena que nadie grabara ese entrenamiento, aunque si no me mandaron para casa, no debí de hacerlo tan mal.
- ¿Qué entrenador ha marcado tu carrera deportiva?
Pepe Duarte, fue el primer entrenador que tuve cuando empecé a jugar. Pepe, que es de Badajoz, fue el entrenador que ascendió al Ademar a Asobal, y dio la casualidad que estaba de vuelta en Badajoz por entonces. Tuve mucha suerte de coincidir con él, ya que él tenía mucho que enseñar y yo mucho que aprender. Aunque no quiero olvidarme de entrenadores que me ha ayudado mucho como Tinín Alonso, Javier Márquez, Iñaki Aniz o Magi Serra.
- ¿Qué aficiones tienes?
Ver y practicar cualquier deporte que se escape del los típicos. Cualquiera que no sea futbol, baloncesto, tenis,…
- ¿Qué música te gusta?
En ese aspecto soy un poco esquizofrénico, puedes pillarme oyendo a Camarón, Reggaeton o El Bolero de Ravel, un poco de todo.
- Tu película preferida.
Tengo tres: Forrest Gump, Cadena perpetua y The Full Monty.
- ¿Tienes alguna mascota?
Que va, mi mujer es alérgica a los pelo de animal. Quizás por eso estornuda tanto cuando está mi lado.
- ¿Cuál es tu grupo de música preferido?
Algarrobo, un grupo de Aranda de Duero que no lo hace nada, pero que nada mal.
- Un lugar para vivir.
Bodonal de la Sierra. Un idílico pueblecito extremeño en las estribaciones de la Sierra de Aracena.
- ¿Eres supersticioso?
Más que supersticioso, maniático diría yo, y con la edad cada vez más. Es increíble la cantidad de “rutinas” absurdas que llegas a hacer, sobre todo los días de partido, que si nos las haces, te piensas que nada va a salir bien.
- Tu plato de comida preferido.
El Bacalao Dorado, plato típico portugués que se come mucho en Badajoz, sobre todo tapeando con una buena cervecita.
- ¿En qué equipos has jugado?
Buff, en muchos. En Badajoz, CBB (1997) y BM. Talavera (1998), después ya vine a estudiar a Valladolid y he pasado por BM. La Salle (1999), BM. Valladolid (2000 y 2005), Aula Cultural (2001), Universidad de Valladolid (2002 y 2003), BM. Villa de Aranda (2004 y de 2009 a 2013), Lábaro Toledo (2006 y 2007), Balonmano Aranda (2008 y 2014) y ahora Atlético Valladolid.
- ¿Qué compañero de equipo no olvidarás nunca?
A Helder Valente, un central angoleño que coincidió conmigo y además era mi compañero de piso el primer año que jugué en el BM. Villa de Aranda. Era bastante peculiar.
- ¿Cuál es el mejor recuerdo que guardas del balonmano?
Pues quizás mi debut en Asobal, que precisamente fue en Huerta del Rey contra el BM. Valladolid, que por cierto ganamos.
- ¿Sigues las ligas extranjeras de balonmano?
Poco, algo a algún equipo concreto donde juega algún antiguo compañero, pero en general, bastante poco
- ¿Cómo ves la situación actual del balonmano?
Complicada, pero hay que ser positivo y mirarlo como una gran oportunidad para la gente joven que viene empujando con fuerza.
- ¿Quién es el mejor jugador y el mejor portero del mundo en este momento para ti?
El mejor jugador Messi y el mejor portero Eduardo Gómez de “La que se avecina”
- Un consejo para los que están empezando.
Que sean constantes y que antes las adversidades no se vengan abajo y sigan luchando, pero sobre todo, que no dejen de lado los estudios. Estudios y deporte son el mejor complemento.
- ¿Qué significa para ti el Atlético Valladolid?
Un soplo de aire nuevo, y sobre todo, ILUSIÓN
- Un mensaje para la afición.
Darle las gracias, ya que si no fueras por ellos, nosotros nosotros no seríamos nadie.
